¿Qué es una audiometría y para qué sirve?
Si buscas información sobre la audiometría estás en el lugar perfecto. Con la ayuda de nuestros expertos en audición te vamos a mostrar qué es y para qué sirve. Nuestro objetivo es que tengas claro todo sobre la audiometría, de aquí que te invitemos a estar unos minutos con nosotros para que te puedas informar.
¿Qué es la audiometría?
La audiometría es un chequeo médico que evalúa la capacidad auditiva de una persona. Se realiza utilizando un dispositivo llamado audiómetro, el cual emite tonos de diversas frecuencias y volúmenes. Durante la prueba, el paciente utiliza auriculares y debe indicar cuándo escucha cada sonido.
En la audiometría del habla, se verifica cuántas de las palabras propuestas, ya sean números o monosílabos, son correctamente percibidas por el paciente mediante auriculares (uno solo) o altavoces (ambos oídos) en un entorno acústico abierto. Esta evaluación se centra en comprender el nivel de comprensión del individuo.
Por ejemplo, en el “Test de inteligibilidad del habla de Friburgo”, el material de la prueba consta de diez grupos, cada uno con diez números de múltiples sílabas, y 20 grupos, cada uno con 20 palabras de una sola sílaba. Las palabras se agrupan de manera que en cada grupo se refleja el contenido de frecuencia promedio del idioma alemán.
Al evaluar la pérdida auditiva para los números (prueba de números), se emplean palabras polisilábicas como elementos de prueba, de las cuales se espera que el paciente comprenda el 50 por ciento. El volumen al cual un paciente logra entender el 50 por ciento se compara con el de personas con audición normal. Por otro lado, la prueba de inteligibilidad del habla (monosilábica) describe el volumen en el cual se puede entender el 100 por ciento de las palabras de una sílaba. En este caso también, se compara el aumento de volumen en el paciente con el volumen normal en personas con audición saludable.
¿Para qué sirve la audiometría?
La audiometría cuenta con diferentes pruebas que buscan analizar la capacidad del paciente a la hora de escuchar los diferentes sonidos. Dependiendo de los resultados de la audiometría podemos saber si una persona necesita de la ayuda de un audífono o no.
Audiometría tonal
Antes de realizar un audiograma tonal, es recomendable llevar a cabo experimentos preliminares con diapasones. Los experimentos de Weber y Rinne son fundamentales para determinar si hay diferencias en la pérdida auditiva entre ambos oídos y para obtener información sobre la naturaleza de la pérdida auditiva.
En el experimento de Weber, se utiliza un diapasón C2 (512 Hz) colocado en el centro de la frente, y el paciente indica si escucha el sonido en el centro de la cabeza, en ambos oídos o solo en uno. La lateralización hacia el oído con peor audición sugiere una pérdida auditiva conductiva en ese oído, mientras que la lateralización hacia el oído con mejor audición indica una posible pérdida auditiva neurosensorial en el oído con peor audición.
El experimento de Rinne compara el tiempo de escucha del diapasón frente al canal auditivo (conducción aérea) con el tiempo de escucha sobre la apófisis mastoides (conducción ósea). El resultado determina si hay una audición normal, una pérdida auditiva en el oído interno o un trastorno en la conducción del sonido en el oído examinado.
En la medición de umbrales de audición tonal, se utilizan auriculares y se registran los puntos de medición en un audiograma. Se comienza probando una frecuencia media (1 kHz) y luego se evalúan frecuencias de octava en octava hasta 8 kHz. Se debe tener precaución al determinar los umbrales auditivos, evitando curvas demasiado precisas que puedan dar una falsa sensación de precisión.
En caso de diferencias en la audición entre ambos oídos, se puede recurrir a la anestesia para evitar la “escucha por casualidad”. Se recomienda anestesiar el oído con mejor audición para obtener resultados más precisos, utilizando tonos o ruidos según sea necesario. Se destaca la importancia de ajustar correctamente los niveles de anestesia para evitar errores en la interpretación de los resultados.
Determinación del rango dinámico
El rango dinámico señala el espacio de operación del oído desde el umbral de audición hasta el límite de control. El umbral de incomodidad, una medida aproximada del límite de control, se determina cuando el sonido supera un nivel que hace que el paciente perciba molestias. Esto se debe principalmente a distorsiones aurales intensas y también está influenciado por la evaluación central del volumen, lo que implica criterios subjetivos y psicogénicos.
Aunque existe cierta incertidumbre, el umbral de incomodidad generalmente se puede establecer de manera confiable y varía sólo ligeramente en comparación con el umbral de audición. Para personas con audición normal, el umbral de incomodidad para sonidos es aproximadamente de 100 a 110 dB, y para ruidos es de alrededor de 90 a 100 dB. Este umbral se determina utilizando pulsos de tono con una duración mínima de 1 segundo.
Durante la prueba, se aumenta gradualmente la ganancia desde 70 dB hasta que el paciente señala que los sonidos son incómodamente fuertes. El umbral de incomodidad se marca en el audiograma con una cruz horizontal. En casos de pérdida auditiva coclear, a menudo se alcanza el umbral de incomodidad dentro o incluso antes del rango de valores normales (hiperacusia), lo que resulta en una reducción en dB entre el umbral de audición y el umbral de incomodidad en comparación con casos normales.
Cuando la dinámica no está restringida, en casos de pérdida auditiva significativa, se puede exceder el límite de amplificación del audiómetro, lo que impide medir el umbral de incomodidad. Un resultado negativo en la determinación del umbral de incomodidad no descarta la presencia de pérdida auditiva coclear; solo se puede confiar en resultados positivos de pruebas con un rango dinámico estrecho.
Audiometría de ruido de Langenbeck
De manera similar a la determinación del rango dinámico. La prueba se fundamenta en la observación de que, en casos de pérdida auditiva coclear, los sonidos son menos afectados por el ruido en comparación con los daños retrococleares. Para realizar la prueba, se establecen los umbrales de audición de los sonidos mientras el individuo está expuesto al ruido. La evaluación se limita a casos que presentan una disminución en la curva del umbral auditivo de al menos 20 dB por octava en ciertas áreas. Se utiliza un ruido de banda estrecha para enmascarar, ya que el uso de ruido de banda ancha podría generar mediciones incorrectas debido a variaciones en el enmascaramiento en diferentes frecuencias. En el caso de un ruido de banda ancha que enmascara de manera uniforme, como el “ruido de Langenbeck”, se requiere la representación absoluta del audiograma. La intensidad del ruido de enmascaramiento se elige de manera que coincida con el valor en dB del umbral auditivo de un tono situado aproximadamente en el centro de la disminución de la curva de pérdida auditiva. Durante la exposición simultánea al ruido, se determina el umbral de audición para este tono, preferiblemente con un tono interrumpido, similar a un audiograma tonal.
¿Cuándo debo usar un audífono?
Tras realizarse diferentes pruebas como el audiograma tonal, la determinación del rango dinámico, prueba SISI o la prueba de la fatiga entre otras el profesional sabrá cuál es la pérdida auditiva.
Dependiendo del resultado obtenido hay que usar un tipo u otro de audífono. Lo que está claro es que siempre debemos usar un buen aparato para tener la certeza de que vamos a obtener una buena audición. En https://www.audifonos-madrid.com/audifonos/precios te será fácil encontrar el audífono que buscas a los mejores precios.
A la hora de comprar un audífono podrás darte cuenta de que, a mayor rango de gama, más caro será el audífono, pero mejores resultados te van a dar. Las gamas de los audífonos se pueden distribuir entre básica, media y premium. Lo importante es realizar siempre una buena comparativa con la cual podrás saber qué alternativa encaja con lo que necesitas. Un audífono de calidad hará que la vida te resulte más fácil. Y recuerda, algunas comunidades ofrecen subvenciones a la compra de los audífonos, es decir, el precio final será más bajo si tienes derecho a las mismas.